Con la entrada del buen tiempo, una parte de nuestro cuerpo lo celebra con especial alegría: nuestros pies. Si, aquellos que soportan nuestra existencia, callados, cerrados a cal y canto lejos de nuestra mirada.
Hoy, al descubierto, descubro su lenguaje, sus anhelos y sus quejas. Me han prohibido bajar, hasta que les preste atención y los mime para afrontar su próximo encierro.
¿Y tú? ¿escuchas a tu cuerpo?
Solo tenemos uno...
Un saludo para mi amigo Daniel/Veintiuno, a quien veo super activo en microrrelatos de verano. Ya un año que nos "conocimos" gracias a esto ¿te das cuenta?. Incluso no debí haber entrecomillado lo de "conocimos", porque tanto contacto ya permite CONOCERNOS casi con mayúsculas ¿verdad?. Esta reflexión es extensiva a los demás amigos compartidos desde Eskup en agosto-2010.
ResponderEliminarUn ABRAZO en mayúsculas, para ti y para todos ellos.
Precisamente yo estaba pendiente del aniversario de esta "conjunción" de almas con ganas de expresar por escrito sus creaciones. Ya hace un año, Luis y celebro contigo esa amalgama de palabras entrelazadas con sabor a amistad. Tú, como conexión de todas ellas recibe este gran saludo por la parte que te toca. Gracias por todo.
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