La reflexión fue un lapsus excesivo. El cielo se cubrió de materia gris, rompiendo el ritmo devastador de los vendedores de humo. Una emboscada a las puertas de la gloria. La conciencia había resuelto los acertijos con dosis de idealismo. El candidato despertó envuelto en sudor.
No hay comentarios:
Publicar un comentario